5 consejos para el mantenimiento de los cascos en los caballos:

Inspecciona los cascos regulares:
Debes examinar los cascos de tu caballo con regularidad para detectar cualquier problema. Presta atención a la apariencia general, la forma y el color de los cascos, así como a cualquier signo de irregularidades, como grietas, roturas o fragmentos perdidos. Si notas algún problema, comunícalo de inmediato a un herrador o a un veterinario para que puedan evaluar el problema y determinar la mejor solución.

Limpia y seca los cascos:
Mantener los cascos limpios y secos es fundamental para prevenir la aparición de infecciones y enfermedades. Limpia los cascos con una herramienta o gancho llamado limpiador de cascos (también en nuestro canal de Youtube te mostramos cómo hacerlo y usarlo correctamente) y elimina cualquier suciedad, barro o piedras que puedan estar atrapados. Esto sin duda te ahorrará dinero y contratiempos con tu caballo.

Proporciona una dieta equilibrada:
Una alimentación adecuada es esencial para la salud de los cascos. Asegúrese de que su caballo reciba una dieta equilibrada y nutritiva que contenga suficientes vitaminas y minerales, especialmente biotina y zinc, que son importantes para la salud de los cascos.

Los problemas de los cascos y los trastornos alimentarios en los caballos pueden estar relacionados. Por ejemplo, un caballo con trastornos alimentarios puede ser propenso a desarrollar problemas en los cascos debido al exceso de peso que tiene que soportar. Además, los caballos que sufren de síndrome de abdomen agudo o cólico, que pueden ser causados por trastornos alimentarios, tienen un mayor riesgo de desarrollar laminitis, una enfermedad grave que afecta a los cascos y puede ser fatal.

Como propietario o cuidador de un caballo, es importante prestar atención a la alimentación del caballo y asegurarse de que esté recibiendo una dieta equilibrada y adecuada para su edad y nivel de actividad

Proporcionar un ambiente adecuado:
El ambiente en el que vive el caballo también puede afectar la salud de sus cascos. Asegúrese de que el lugar donde pasa el caballo la mayor parte del tiempo esté seco, limpio y libre de objetos que puedan causar daño o lesiones.

La limpieza del establo no se trata solo de recoger la suciedad y los desechos. También se trata de prevenir la acumulación de bacterias y hongos que pueden ser perjudiciales para la salud de los caballos. Estos microorganismos pueden crecer en el suelo húmedo y sucio y causar infecciones en los cascos de los caballos. Además, el estiércol acumulado y las camas sucias pueden atraer insectos y roedores que pueden transmitir enfermedades a los caballos y las personas que los rodean, por ejemplo la leptospira, es una enfermedad zoonótica (transmisible a humanos) la enfermedad es causada por la bacteria Leptospira interrogans, que se encuentra comúnmente en ambientes húmedos y cálidos como el agua estancada, la tierra y el estiércol de animales infectados como ratas y murciélagos.

Cuando el establo está limpio y bien ventilado, tienen menos posibilidades de desarrollar problemas de cascos. Los cascos son una parte vital de la anatomía del caballo y deben mantenerse limpios y secos para evitar infecciones. Cuando los cascos están expuestos a la suciedad y la humedad, pueden desarrollar infecciones como la podredumbre (hormiguillo o enfermedad de línea blanca) del casco y la laminitis. Estas afecciones pueden ser dolorosas para el caballo y pueden limitar su capacidad para moverse y realizar actividades normales; además de generar gastos monetarios adicionales y significativos.

Mantener el establo limpio no solo es importante para la salud de los caballos, sino también para el bienestar de las personas que trabajan allí. Un establo limpio es un lugar de trabajo más seguro para los cuidadores y puede ayudar a prevenir lesiones causadas por resbalones y caídas.

Programa periódicamente el recorte de los cascos:
El cuidado de los cascos es fundamental para la salud y el bienestar de los caballos. Los cascos son la base de soporte del cuerpo del caballo y deben mantenerse en buenas condiciones para garantizar que el animal pueda moverse con comodidad y sin dolor. Una parte importante del cuidado de los cascos es el recorte regular, que implica cortar y dar forma a la pared del casco y la suela. Sin embargo, muchos dueños de caballos pasan por alto la importancia del recorte y dejan los cascos de sus caballos sin cortar durante largos períodos de tiempo.

La falta de recorte regular (entre 4 y 6 semanas) puede tener consecuencias graves para la salud de los cascos de los caballos. Los cascos pueden crecer demasiado largos y comenzar deformarse, y por ende modificar el estuche córneo, lo que puede causar problemas de equilibrio, dolor al generar tensiones dañinas en articulaciones y tejido blando.

Los cascos largos y descuidados pueden acumular suciedad y escombros, lo que puede aumentar el riesgo de infecciones y enfermedades afectando significativamente su desarrollo deportivo y su tiempo de vida útil.

El recorte regular de los cascos ayuda a mantener una estructura adecuada y promueve una distribución uniforme del peso en los pies del caballo. Esto ayuda a prevenir lesiones y dolores en las articulaciones y los músculos del caballo. También puede mejorar la postura y la marcha del animal, lo que puede ser beneficioso para la salud en general.

Es importante que los dueños de caballos comprendan la importancia del recorte regular de los cascos y trabajen con un herrador calificado para mantener los cascos de sus caballos en buenas condiciones. Los cascos deben ser recortados según el ritmo de crecimiento del animal, que varía de un caballo a otro. En general, se recomienda que los cascos se recorten cada 4 a 6 semanas para garantizar un buen cuidado y evitar problemas.